La protectora `No me abandones´ necesita nuestra ayuda



Hoy, en este artículo especial, queríamos hablar de un tema que como ya mencioné hace algunas semanas a través de mis redes sociales, me toca especialmente la fibra. Estoy convencido de que esta cuestión os tocará de cerca seguro a muchos de vosotros y vosotras también, queridos y queridas lectores/as.

Efectivamente, el asunto que abordamos hoy no es otro que el del abandono de esos seres entrañables y tan bellos que desde la antigüedad han acompañado al hombre, y que con el paso del tiempo se han convertido en parte esencial de nuestras vidas y también, por qué no decirlo, en miembros de nuestras familias.
Por desgracia, no todas las personas ven igual a estos “peludetes”, a estos fieles amigos. No es raro que en ocasiones los traten como simples juguetes o caprichos, o puede que incluso los empleen para menesteres menos agradables, siendo no pocas veces maltratados.

Y ahora, además, en estos tiempos tan difíciles de confinamiento y crisis, debido a la pandemia que azota al mundo sin misericordia, y que por desgracia tanta pena y dolor nos está causando, una vez más, los grandes olvidados son ellos. No todos tienen la suerte de tener una manada y un techo, ni alimento ni medicinas si se ponen enfermos.
He ahí otro de los motivos principales de este reportaje. 

Pero este artículo está ideado para generar esperanza y prestar también, de alguna manera, ayuda a todos ellos. Así que vamos a intentar dejar las penas a un lado y pasar a daros la mayor cantidad de información, siempre de la manera más exhaustiva y útil que sea posible. 

Así que para comenzar quería dejaros dos fotos de Django (nombre que le puse en homenaje al personaje de Franco Nero del Spaghetti western de los sesenta, y que más tarde homenajeó a su forma Tarantino). Una de cachorro, y otra del verano pasado.



Este es mi pequeñajo mestizo de casi treinta kilos que con dos años y medio sigue siendo un niño juguetón, extremadamente “pegajoso” y que agradezco cada día (algunos más que otros) por tenerlo a mi lado.

¿Y por qué nos enseñas a tu perrete, os preguntaréis?

Porque a Django lo recogí de una protectora siendo todavía un cachorro. Su dueño lo tenía junto a su madre y sus seis hermanos escondidos en un pajar de una pequeña parcela con la intención de matarlos. Por fortuna, llegaron a tiempo de salvarlos. Por tanto, considero que la adopción y recogida de estos pequeños (vale, a veces no tan pequeños) bichejos que tanta compañía nos hacen, es una labor necesaria y muy importante.
Y es ahí donde entran en juego las protectoras. 

Grupos de personas, amantes de los animales, que de manera altruista y sin ningún tipo de ánimo de lucro, recogen a estos “juguetes rotos” y abandonados. Personas como decía, que desinteresadamente tratan de darles una mejor calidad de vida, hasta que llegue la persona adecuada que les ofrezca un hogar en el que puedan recibir todo el cariño que se merecen
Llegados a este punto, quiero pasar a hablaros de una asociación con la cual tengo cierta afinidad, y a la cual me gustaría que le dedicarais unos pocos minutos de vuestro tiempo. Porque de verdad os digo que hacen una labor encomiable y digna de admiración. Dicha asociación es la protectora “NO ME ABANDONES” ubicada en Jerez de la Frontera (Cádiz).

No quiero dejar pasar la oportunidad antes de avanzar, de agradecer a Sandra López Ramírez su contribución y ayuda en este reportaje, colaborando con algunas preguntas e información adicional de interés. Mencionar que ella es voluntaria en activo y adoptante. Que además es la persona que me mantiene informado de la evolución de la asociación, y también fue la que me puso en contacto directo con su presidenta, de la que en breve pasaremos también a hablar.

Aquí os dejo un par de fotos para que conozcáis también a Sandra y su pequeñajo adoptivo Ícaro, el cual, como apreciaréis enseguida, es un cruce con galgo. Por desgracia también una raza muy maltratada, ya que suele usarse para la caza. De manera que, en cuanto se hacen mayores, o ya no dan el rendimiento que esperan sus propietarios, terminan en el “mejor” de los casos y digo mejor, porque a veces hacen auténticas barbaridades con ellos, abandonados.



Los orígenes de No me abandones se remontan al 2001, año en el cual se estableció en Jerez la asociación. Desde entonces han trabajado sin descanso para que cientos de “peludetes” encuentren su sitio en este refugio hasta conseguirles una nueva familia.
Actualmente está formada por unos cuarenta voluntarios aproximadamente de todas las edades y que no cobran un solo euro por su labor, ya que están concienciados en que cada céntimo que puedan obtener es para sus “peludos”.


El trabajo de NMA se centra en dos grandes áreas:

–La gestión diaria del refugio está destinado a la atención y cuidados de alrededor de cien animales abandonados en las calles de Jerez. Durante diecinueve años de actividad han rescatado a más de mil perros. Estos bichitos viven en el refugio hasta que son adoptados, y cuando esto ocurre, dan entrada a otros animales abandonados para que tengan posibilidades de encontrar una familia que los quiera.

Campañas de sensibilización basadas en el respeto hacia los animales, su vida, sus sentimientos y sus derechos; y su tenencia responsable. Entre sus actividades de concienciación social destacan las charlas, stands de merchandising de productos artesanales, salidas con sus perros, etc.


A continuación, y antes de entrar un poco en materia, me gustaría aportaros algunos datos que gentilmente me han cedido desde la asociación a través de un completo dossier. Así podréis familiarizaros con el funcionamiento de esta asociación y tener de paso algo de información real y que, por desgracia, también es sumamente entristecedora:

«Cada año se abandonan más de ciento cincuenta mil animales en España, lo que equivale a cuatro nuevos perros, gatos y pequeños roedores en la calle cada minuto. A veces, son atropellados o mueren por falta de alimento y por las malas condiciones. Otras, son capturados por perreras, donde muchas veces son sacrificados.
El elevado número de abandonos es debido a varios factores, como la irresponsabilidad en su tenencia por parte de los dueños, la cría ilegal, las facilidades para compra y venta de animales de compañía y la falta de regulación de protección animal por parte de la administración.
Los perros de cacería no resultan útiles para los dueños cuando llegan a una cierta edad, por lo que los abandonan. También está la clásica historia del perro o gato regalado cuando es pequeño, y cuando crece ya no lo quieren más. O la mascota que no sabes dónde dejar cuando te vas de vacaciones. O la gata sin esterilizar que se escapa y vuelve preñada… Todo esto son ejemplos que escuchamos casi a diario, excusas por las cuales se abandonan animales. Pero para nosotros no existe motivo alguno para justificar el abandono.
La labor de las protectoras es fundamental en nuestro país, ya que recogen y dan en adopción a miles de animales abandonados, aparte de llevar a cabo campañas de concienciación y esterilización. Hoy en día, estas asociaciones no reciben subvenciones ni ayudas con las que hacer frente a los numerosos gastos que tienen. Es por eso que se ven obligadas a autofinanciarse, lo cual no siempre resulta sencillo.
Desde No Me Abandones reivindicamos la creación de políticas de sacrificio cero a nivel nacional, la prohibición de la exposición de mascotas en escaparates, el control de la cría ilegal, campañas de sensibilización y la creación de una leyes de protección animal que no permitan el maltrato bajo ningún concepto».


Ahora sí, ha llegado el momento. Me gustaría pasar a presentaros a una persona imprescindible para que en la actualidad NMA funcione adecuadamente. Por supuesto, con la aportación de esos grandes héroes que son los voluntarios, y a la que posteriormente y para finalizar, pasaremos a entrevistar.

Se trata de Fátima González Castrelo.

En su vida profesional es Licenciada en Geografía e Historia y Diplomada en Magisterio, desempeñando la enseñanza como profesora en un centro de Secundaria concertado de la ciudad.
Desde hace ocho años es la presidenta de la asociación protectora No me abandones, y además es socia y voluntaria desde sus comienzos en la actual ubicación del recinto.

Antes de todo esto, Fátima comenzó a contactar con un grupo de valientes que ayudaban a unos 30/40 perritos  en unos terrenos de la zona de Chapín. Empezó a colaborar con ellos con donaciones de pienso, recogiendo dinero de familia y amigos. A ella les gusta llamarlos valientes cuando se refiere a estos voluntarios. Y razón no le falta, porque trabajar en las condiciones en las que estaban y con los medios que contaban, cito sus palabras textuales “demuestra una solidaridad enorme y un infinito y paciente amor por los animales”.

De allí precisamente salió la primera perrita a la que acogió: Vicky. Ella me decía que estableció un vínculo alucinante con ella, y que tal vez fue también por eso su “peludita” más querida. Tenía trece años, enferma de  erliquia, riquesia, lehismania y ansiedad por separación, pues había sido abandonada tres veces. Creyeron que viviría unos meses y estuvieron juntas dos años, que difícilmente Fátima olvidará, a pesar de que hace ya once años que no está a su lado.

Retomando el hilo de sus comienzos como colaboradora, cuando los terrenos en los que trabajaban estos voluntarios fueron expropiados para ampliar la red ferroviaria de la ciudad tuvieron que movilizarse contrarreloj. Por fortuna, y en tiempo récord, consiguieron el terreno actual que estaba vallado y contaba con agua corriente. Pero poco más. De esto ya han pasado casi veinte años. Sin embargo, y de nuevo empleando palabras de Fátima “desde entonces y con el esfuerzo de todos hemos ido mejorando las instalaciones y tenemos que seguir mejorando pues ahí, en la “prote”, nunca nada está terminado; siempre, siempre, siempre, hay que mejorar, arreglar, añadir, adecentar…”.

Y ahora ya que conocéis un poco mejor a Fátima, creo que sin más dilación ha llegado el momento de pasar a la entrevista, que nadie mejor que ella para contarnos de primera mano la situación actual de la asociación.

–Hola, Fátima. Muchas gracias por sacar un ratito para pasarlo con nosotros y responder a nuestras preguntas. Y, por supuesto, bienvenida a Chica SombraCuéntanos lo primero de todo. ¿Cómo es un día normal en tu vida?

Hola, David, gracias a vosotros por atendernos y darnos visibilidad.
Como sabes, soy profesora de Secundaria, por lo que un día de mi vida normal empieza a las 6.30 para tener tiempo de sacar y atender a mis perros y llegar a clase a las 8. ¿Te imaginas el día a día de una profesora tratando con unos 120 adolescentes al día? Una locura, pero me gusta lo que hago. Durante el descanso apenas tengo tiempo de tomarme un café pues pongo el móvil y siempre, siempre, siempre hay varios temas de la protectora que atender y llamadas que realizar, incluso urgencias y rescates, que son muy frecuentes. El resto del día lo llena fundamentalmente lo mismo, cuestiones de la protectora o incluso ir tras sacar a mis perros 10 minutos, realizar el segundo turno en el refugio. Aparte de atender a la familia, a la preparación de clases y sacar un ratito para leer, pasear e incluso los lunes practicar yoga.

–Y al hilo de todo esto, aprovechando la pregunta anterior, ¿cómo es un día en No me abandones?

Pues un día normal en NMA es llegar tres personas, cada una a un patio, entre las 8.30 y las 9 de la mañana; cada uno se va a su patio, donde lo primero es dar las pastillas a los que tienen tratamiento de mañana, observar que están todos bien y ya empezar la faena: se preparan los piensos y/o comidas especiales que haya en ese patio y se empieza a sacar a los perritos según los turnos establecidos, mientras la voluntaria/o limpia dicha jaula; diariamente se limpian con lejía y se renuevan sábanas o mantas, según necesidades; antes de guardarlos se le hacen sus curas si las tienen, alguna herida, limpiar oídos, poner cremas… y se les pone la comida y el agüita limpia y ya se guardan y sale el siguiente turno. Como en cada patio hay unas 10 salidas de media, sobre las 13.30/14 h. se empieza “a sacar de segundas”, vuelven a salir y como ya están las jaulitas limpias, se juega con ellos, se les hace correr, se les llena de mimos y caricias…lo que es disfrutarlos. Cuando oscurece, en invierno a las 18 y a partir de la primavera sobre las 20 o 21 h, se les vuelve a poner de comer y se dan las pastillas de los tratamientos de tarde. Normalmente en ese tiempo hemos lavado mantitas, sábanas, toallas, hemos recogido el patio y limpiado la canaleta de desagüe. Todo eso si no hay imprevistos, que los hay casi a diario: llegada de padrinos para pasearlos, llegada de adoptantes que ya han pasado todo el protocolo y van a recogerlos, urgencias por algún accidente o porque alguno está malito, llevar al veterinario a los que hay que operar, castrar, revisar…visita de la veterinaria (una vez a la semana), llegada del camión del pienso, llegada de donaciones, reparaciones varias, mantenimiento...


–¿Qué instalaciones tenéis actualmente en la asociación? Y ya de paso, ¿contáis con ayuda externa, por ejemplo de profesionales, como veterinarios, adiestradores que participan con la protectora de manera altruista?

Bueno, nuestras instalaciones han ido mejorando a lo largo de los 20 años que llevamos allí, pero fundamentalmente gracias al trabajo de los voluntarios y/o de trabajadores externos cuando se ha necesitado y gracias a los beneficios obtenidos de los eventos realizados, de las manualidades y de las cuotas de socios y padrinos y de las donaciones. Actualmente tenemos el terreno dividido en tres patios y en cada patio hay unos 12 cheniles de media, con sus respectivas casitas y patio. Tenemos acuerdos con veterinarios que nos hacen un precio especial y también con algún etólogo; a veces incluso, estos han colaborado altruistamente.

–¿Qué requisitos debe reunir cualquiera de nuestros lectores que a raíz de este artículo quieran colaborar con vosotras como voluntarios? ¿Qué perfiles son los que más os soléis encontraros dentro del voluntariado?

Pues los requisitos para ser voluntarios son: primero rellenar un cuestionario y segundo pasar un periodo de formación con un/a tutor/a. Dicho periodo varía en duración dependiendo de la valoración de dicho tutor y de la seguridad y confianza del voluntario.
Además, como requisitos pedimos que sean responsables, comprometidos, que acepten las normas y los protocolos establecidos por el buen funcionamiento y la integridad de nuestros inquilinos y, por supuesto, que quiera y defienda a los animales.
Tenemos una persona responsable de la formación del voluntariado que lo hace maravillosamente bien y otra encargada del voluntariado una vez que pasan a serlo de pleno derecho que, además de hacerlo igual de bien, es una institución y un referente en NMA.
El perfil del voluntariado es muy variado en cuanto a edades, profesión, estudios….pero en lo que es bastante homogéneo es en que predominan las mujeres. También tenemos personal masculino, aunque creo que el porcentaje es de cuatro a uno.


–Me contabas cuando hablamos el otro día por teléfono que le dais prioridad (por razones obvias) a perros abandonados que cuentan con algún tipo de enfermedad. Imagino que debe de ser duro. ¿A qué tipo de retos os enfrentáis al acoger a perretes con estos problemas?

Sí, ante la falta de sitio y de recursos, no podemos acoger a tanto animal abandonado y/o maltratado; las prioridades son los más desvalidos: enfermos, atropellados, viejitos, cachorros que no se pueden valer por sí mismos o perritas preñadas. Ojalá pudiéramos acoger a todos. Y, por tanto, los retos son fundamentalmente económicos pues estos perritos necesitan muchos cuidados, tanto veterinarios como de medicación; así como de tiempo, pues hay que dedicarles mucho y a veces, el refugio no es el lugar adecuado para ellos y necesitamos buscar casas de acogida…


–Tú mismamente me expresabas con un cierto deje de tristeza (algo que comparto), que muchos de estos perritos por desgracia nunca encuentran una familia. Y por tanto pasan toda su vida o gran parte de ella en la protectora. Tengo entendido que tú haces una labor adicional para darles una mejor calidad de vida en esos últimos años de vida. ¿Podrías contarnos un poco acerca de esta labor?

Bueno, a mí una de las cosas que más me entristecen de nuestros acogidos son los que, por las circunstancias que sean, se pasan años y años sin encontrar su hogar y sin conocer ese tipo de vida, y cuando ya tienen 11 o 12 años, se nos encoje el corazón de que nadie se fije en ellos y de que puedan morir allí. Por ello, no solo yo, sino todos y fundamentalmente el equipo de adopciones, procuramos adopción para ellos y, aunque cuesta, pues no todo el mundo está preparado para ser tan generoso y adoptar a un abuelo, estamos teniendo bastante éxito y están saliendo algunos de nuestros peludos más emblemáticos con 10, 11 y 12 años. Y esa es una de las mayores alegrías. Yo también, cuando va llegando el momento y no salen, me llevo a alguno de los más mayores y es increíble lo que te dan. Es una experiencia mucho más enriquecedora que triste, que evidentemente también lo es cuando al cabo de uno, dos o tres años tienes que despedirte de ellos. Pero merece la pena, SIEMPRE.


–Quería pasar a continuación a tratar un tema que, por desgracia, sé que os está afectando a vosotras como asociación, pero especialmente a los perretes que tenéis a vuestro cargo. Se trata del Covid-19. Tengo entendido que esto ha provocado que hayáis pasado a estar en una situación, podríamos decir crítica, debido a que los ingresos y aportaciones que están entrando (siempre de manera solidaria, ya que no hay ayudas gubernamentales que apoyen estas iniciativas) debido al confinamiento no son suficientes. Incluso tengo entendido que había organizado un concierto benéfico que os habría ayudado bastante a afrontar estos gastos que se ha tenido que aplazar, cosa que complica todavía más el problema.
¿Podrías decirnos, Fátima, qué iniciativas soléis llevar a cabo para recaudar fondos y que vuestros “peludos” puedan seguir teniendo un sitio donde vivir? ¿De qué medios disponéis para ello? Y también me gustaría saber si hay empresas que colaboran con vosotras también de alguna manera. Y ya de paso, y tal vez la pregunta más importante, ¿cómo puede contribuir todo aquel que esté interesado en ayudar a la asociación?

Sí, la situación actual es algo crítica y sobre todo preocupante, pues aún no sabemos lo que va a durar o sus repercusiones. Nuestros ingresos llegan por una parte por las aportaciones de socios, padrinos y donaciones puntuales y, por otra, de las actividades que generamos, como la venta de nuestro calendario (llevamos ya 15 años editándolo y vendemos cerca de 3000), las salidas a diferentes eventos con nuestra mesa de artículos y manualidades, muchas de ellas elaboradas por algunas voluntarias, como puede ser San Antón, un sábado al mes en Tiendanimal, que nos cede su espacio a las distintas protectoras de la zona, un concierto bienal en las bodegas Luis Pérez de un éxito bárbaro y cuya tercera edición hubiera sido el pasado 17 de abril; hemos hecho exposiciones de pintura con motivos muy diversos y curiosos donde, además de venta, se ha realizado subasta; una labor magnífica es la de nuestras voluntarias en el rastro de los domingos, donde vendemos lo que nos donan y nos ayuda bastante. Muchos novios nos encargan los detalles para sus invitados y estamos teniendo mucho éxito con esa actividad….En fin, “la imaginación al poder”. Ahora todo esto último está parado, pero la fidelidad de nuestros socios y padrinos seguro que nos ayuda a pasar este bache.


–¿De qué manera distribuis todos esos ingresos? Porque imagino que no será una labor sencilla, teniendo en cuenta que no solo tenéis perros enfermos a los que hay que cuidar, sino también instalaciones que mantener, etc.

La principal partida mensualmente va para veterinario, piensos (no sólo el normal sino especiales, como hepático, renal, gastrointestinal, cachorro…..), medicamentos y latas de recuperación.
Después, otra partida importante va para el agua, lejía, detergente, insecticidas……
Esas son mensuales porque son imprescindibles, pero siempre hay que estar arreglando algo, azulejos que se caen, techos que se calan, desagües que se atascan, fosas sépticas que limpiar, vallas que reparar, cerrojos, pestillo, puerta de entrada, las cámaras de seguridad... Menos mal que para algunas de estas cosas contamos con voluntarios/as apañados, con algunos maridos “manitas” y solidarios, y con un voluntario que va semanalmente al tema de jardinería y que tiene la parcela de lujo.


–Ahora para continuar,¿podrías contarles a nuestros lectores cuáles son los próximos eventos y proyectos que tenéis planeados para cuando pase la cuarentena y el país vaya volviendo a la normalidad?

Lo primero comenzar con las adopciones, que hay unos cuantos perritos que ya lo están y esperamos el fin del estado de alarma para poderlos llevar a sus hogares; en segundo lugar hacer salidas a Tiendanimal y a donde nos autoricen a vender nuestros artículos y llevar a algunos de nuestros perretes en adopción y, por supuesto, realizar ese concierto bienal del que he hablado antes y para el que prácticamente ya teníamos todo preparado, incluso cartel y entradas.

–Para finalizar, y como es habitual en todas las entrevistas que hacemos desde Chica Sombra, ¿eres feliz?

Pues se podría decir que sí, evidentemente todos tenemos luces y sombras, pero disfruto con lo que hago y con lo que tengo y creo que eso es lo importante.

–Fátima, muchas gracias por tu tiempo. Y, sobre todo, os deseamos desde aquí lo mejor a todo el equipo de No me abandones, y también a todos esos amigos que aguardan impacientes una familia en vuestras instalaciones.
Las últimas palabras son tuyas. Si quieres aprovechar para decir algo más, este es tu momento.

GRACIAS A VOSOTROS por darnos esta oportunidad, por hacer visible nuestra labor, por darle voz a los que no la tienen y necesitan una segunda oportunidad  y “NO COMPRES, ADOPTA". Te lo dan todo. Y si tienes un corazón grande y quieres vivir una gran experiencia, adopta a un senior o a algún enfermito. No te arrepentirás. Gracias de corazón.

Antes de finalizar, quiero dejaros unas pequeñas maquetas que ha elaborado Sandra, con datos que que previamente nos ha facilitado Fátima, donde podéis conocer a los perretes que necesitan ayuda de manera más urgente, y también de qué manera prestarles dicha ayuda.





Buenos amigos y amigas, os agradezco de corazón que le hayáis dedicado un rato de vuestro tiempo, a este reportaje especial. Espero que sirva para que estos grandes amigos reciban la ayuda que se merecen y puedan seguir adelante.

De nuevo y como siempre, gracias.
Nos vemos pronto.


Chica Sombra

6 comentarios:

  1. Me ha encantado este reportaje. Te felicito por ello, en serio, me parece un tema que debería difundirse más a menudo y coincienciar a la población es imprescindible. A mí también mucho la fibra, ahora mismo tengo cuatro gatos, también tuve perro antes que ellos. La labor que hacen las protectoras es alucinante, pero lo mejor sería que no existiesen, porque eso significaría que no habría animales abandonados. Sin duda, el trabajo que llevan a cabo es admirable.

    Muchas gracias por el reportaje!!

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  2. Hola! Genial entrada y maravilloso trabajo el que hacen, yo a mi cosita pequeñita también la adopté ahora ya hace 6 años y es la Reina de la casa!

    Un saludo!

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  3. Ya creo que necesitan mucha ayuda, colaboro con ellos y otras más, y la situación es desesperada. Necesitamos más conciencia y educación 🤬😖
    Tengo una colonia de gatos y unos cuantos perros y estoy esperando me permitan obtener la categoría de Refugio 😒

    Besos.

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  4. Admiro profundamente la labor de estas protectoras. Las mascotas que he tenido han sido siempre adoptadas. No me planteo comprar y ójala la sociedad se dé cuenta de que merece la pena darle un hogar a estos animales.
    Un abrazo.

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  5. Muchísimas gracias por un reportaje tan exhaustivo como necesario
    Besos

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  6. Una entrada tan necesaria... Gracias por compartir en nombre de todos los amantes de los animales, en la zona donde vivo han cerrado una de las protectoras porque molestaba y es una pena ojalá terminemos con esta lacra pues no hay amor más incondicional que el de una mascota, para mí imprescindibles para mi día a día. Me planteo adoptar de nuevo más adelante pero ahora tenemos dos en casa y mi Moni está ya viejita y se lleva fatal con cualquier otro animal...
    Ánimo con la situación, un beso =)

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