Entrevista a Carlo D´Ursi: `Mi compromiso con la infancia es muy fuerte´

 


Hoy tenemos en Chica Sombra la visita de Carlo D´Ursi, director del cortometraje Yalla, que denuncia los ataques de drones militares a la población civil a través de un hecho real ocurrido el 16 de julio de 2014 en el que cuatro niños de entre 9 y 11 años fueron asesinados por la Marina israelí en la Franja de Gaza.   

Bienvenido Carlo, siéntete como en tu casa. Cuéntame, ¿cómo es un día normal en tu vida? 

Desde hace cinco meses que han nacido mis dos hijos mellizos, mi vida carece en absoluto de una rutina. Mis horarios, diurnos y nocturnos, están supeditados en su totalidad a mis bebés.  

Después de ver Yalla, tengo que confesarte que me ha tenido todo el rato con un nudo en la garganta, sobre todo al conocer el hecho real que te ha llevado a rodarlo. ¿Cómo de impotente te sientes cuando pones la tele y ves casos así? 

Intento convertir este sentimiento de impotencia en un motor creativo. Contar este tipo de historias es necesario, aunque no agradable incluso para los que las creamos.  

Durante el año 2019, más de 12000 niños murieron o resultaron heridos durante conflictos armados. Carlo, ¿cómo se podría parar estar barbarie? 

El 13 de diciembre, el secretario general de Naciones Unidas Antonio Guterres ha hecho un llamamiento para regular el uso de las armas autónomas que matan por algoritmos. Desgraciadamente, no se ha llegado a un consenso y este asunto sigue en fase de negociación. A nivel de sociedad, apoyar los mensajes como el de YALLA o las campañas vinculadas como #stopkillerobots es una acción que puede ayudar a la “causa”.



En Yalla, precisamente, esa es la única palabra que escuchamos durante todo el cortometraje. Yalla, expresión similar a Vamos o Venga. ¿Era esa tu intención desde un principio, que fuese el único diálogo? 

Me preocupaba que, ante un hecho tan dramático, los diálogos pudieran ahondar en el dolor y convertirlo en un melodrama. Por otro lado, usar una sola palabra permite una enorme difusión del corto porque dinamita la barrera idiomática.  

‘Yalla’ fue galardonado con el Premio Forqué el año pasado y opta al Premio Goya a Mejor Cortometraje este año. ¿Cuánto vértigo da esto? 

Más que vértigo, responsabilidad. Ser padre ha reducido mi ego a mínimos términos, por lo que todo el ruido y los focos, que en otro momento podrían haberme resultado atractivos, ahora mismo son mas bien un problema en mi vida diaria. Sin embargo, el compromiso por los derechos de la infancia en esta fase de mi vida es aún más fuerte. 

¿Me puedes contar algo sobre tus próximos proyectos? 

Estoy rodando como productor ahora mismo “La revolución de las musas”, un documental que revindica el rol de las trabajadoras sexuales en la historia del arte. En un momento de acalorado debate sobre el prohibicionismo, creo que será muy interesante investigar quiénes eran estas musas que están representadas en nuestros museos nacionales, que son símbolos de nuestro país, y que las exhiben.  

Para terminar, darte mil veces las gracias y hacerte una última pregunta: ¿eres feliz? 

La felicidad es un estado provisional y cambiante. Si lo consideras así, puedo decirte que sí, soy feliz.  


 

Chica Sombra

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