Dramaturgia, Dirección y Espacio Escénico: Isidro Timón

Intérprete: Amelia David

Texto: Fermín Solís e Isidro Timón

Composición Musical y Espacio Sonoro: Lorenzo González

Diseño de Iluminación: Jesús Pablos y Fran Cordero

Adaptación Viñetas: Fermín Solís

Área técnica: Jesús Pablos

Producción: Maltravieso Teatro

Ayudante de producción: Ángeles Morlón

Sinopsis:

Medea, la princesa maga de la Cólquida, la que fue esposa de Jasón y mató a sus hijos por desamor, la que tuvo que huir de Corinto, Atenas y Asia Menor, acosada por humanos y dioses, objeto de la furia de Zeus, va a la deriva en un enorme bloque de hielo que mengua día a día, camino de un destino desconocido. Pero esta no es su única angustia: es un ser inmortal y no puede morir, ni por su propia mano. Está condenada a vivir hasta el fin de los días.

Opinión personal de Santy Portela:

Bienvenides a Chica Sombra. Hoy os traigo mi opinión de una obra de teatro que disfruté en la sala Tarambana (https://www.instagram.com/salatarambana/?hl=es) de Madrid: “Medea a la deriva” de la compañía cacereña MalTravieso Teatro (https://www.instagram.com/maltraviesoteatro/?hl=es). 

Medea, la princesa maga de la Cólquida, la que fue esposa de Jasón y mató a sus hijos por desamor, la que tuvo que huir de Corinto, Atenas y Asia Menor, acosada por humanos y dioses, objeto de la furia de Zeus, va a la deriva en un enorme bloque de hielo que mengua día a día, camino de un destino desconocido. Pero esta no es su única angustia: es un ser inmortal y no puede morir, ni por su propia mano. Está condenada a vivir hasta el fin de los días. 

Cogiendo el personaje mítico de Medea, el texto nos presenta un futuro nada halagüeño en el que la princesa maga es condenada a pasar la eternidad en un bloque de hielo surcando los mares. Medea no cuenta los días, se cansó de hacerlo, cuenta los pasos de ese iceberg en el que navega, quizás ansiando que termine por desaparecer y así ella hallar cierta paz en una muerte que ya ha buscado sin encontrarla. 

Me resultó sumamente curioso que la obra esté basada en una novela gráfica y que ésta forme parte del espacio escénico y esté bien integrada mediante proyecciones. Siempre es complicado jugar con proyecciones en el teatro sin que se coman el acto teatral y desvíen la atención, pero en “Medea a la deriva” forma un todo con la obra y añade enjundia, además de permitir ver las viñetas de la novela gráfica. 

El trabajo de Amelia David, la actriz, es soberbio. No solo por enfrentarse durante una hora ella sola a un monólogo complicado, sino también por el esfuerzo físico y anímico que pone. Lo da todo en escena y, aunque al principio pueda resultar algo histriónica su actuación, cuando va avanzado la obra uno se percata de que su personaje es así: Medea va perdiendo la razón en su deriva y va cayendo cada vez más en las garras de la locura más excesiva que te puedas imaginar. 

¿Quién se lo puede reprochar? 

Abandonada por dioses y hombres, vuelve una y otra vez a su crimen, a sus circunstancias y a lo que se ha transformado o, mejor dicho, a lo que le han obligado a transformarse. Y durante el monólogo nos regala varias reflexiones muy potentes, como píldoras, a las que dar vueltas. Sobre la mujer, sobre ser migrante y extranjera en tierra ajena, sobre las injusticias de los dioses en el trato al ser humano... Todo ello mientras habla con Zeus. Y yo me preguntaba: ¿está hablando con el dios del Olimpo o con ella misma en voz alta? 

El final guarda una pequeña sorpresa que prefiero no desvelar. Un giro radical que juega con el espectador y nos hace partícipe de la obra en su totalidad. 

Para acabar, espero que “Medea a la deriva” regrese a la cartelera madrileña en la próxima temporada porque creo que es una obra que merece mucho la pena y resulta algo triste que, debido a las circunstancias del verano y el fin de semana que era, no haya tenido el reconocimiento que se merece. Y también, ya de paso, estaré atento a la próxima programación en Taramabana, una sala a la que me une una relación muy cercana y a la que tengo mucho cariño. Ahora en junio tienen su festival de teatro breve y su festival de cortos por si os apetece pasaros. 

Nada más. Muchas gracias por leerme y nos vemos en breve.