Teatro: El ciclista utópico

De Alberto de Casso

Con Fran Perea y Fernando Soto

Dirección Yayo Cáceres

Sinopsis:

Un día, Manuel, un maestro rural que vive feliz con su mujer y sus tres hijas, cegado por el sol atropella en un cruce al ciclista Acebal. El accidente hará que surja un vínculo fuerte, tenaz y sumamente destructivo entre ambos. El ciclista Acebal se infiltrará en la vida familiar y laboral de Manuel hasta que su presencia resulte sofocante y todo llegue a un punto de no retorno. Al final el atropellado se convierte en atropellador.

Opinión personal:

Hoy he ido por primera vez al Teatro Cervantes de Málaga, junto a mi novio, para disfrutar de "El ciclista utópico", obra protagonizada por Fran Perea y Fernando Soto. Nada más llegar nos hemos dirigido a recoger nuestras entradas a la zona de prensa, y alguien nos ha gritado: "¡No cierres!". Al darnos la vuelta, hemos visto a un simpático Fran Perea que corría hacia nosotros para entrar antes de que cerrásemos. Tras este encuentro, hemos entrado al patio de butacas y nos hemos sentado para disfrutar del espectáculo. Espectáculo que prometía mucho para mí por la dirección de Yayo Cáceres, al que conocí gracias a la maravillosa "Cervantina" en Valencia.

Manuel (Fran Perea) es un maestro rural que vive feliz junto a su esposa y sus hijas, hasta que un día, por un despiste y un sol cegador, atropella a un ciclista. Acebal, la víctima, muy pronto se convierte en su verdugo, entrometiéndose en la vida, la familia y el trabajo de Manuel, que poco a poco va perdiendo los nervios.

Tengo que reconocer que no veía actuar a Perea desde Los Serrano, pero me ha sorprendido gratamente verlo encima del escenario, al igual que a Fernando Soto, cara muy conocida por sus papeles secundarios en televisión. Los personajes dan lo que prometen: sofoco, agobio y tensión. Aunque también nos han regalado, además, muchas risas y un humor retorcido que me encanta.

La obra es tan entretenida que se hace corta, muy corta, aunque también es verdad que su duración no es muy extensa. Los dos actores llenan el escenario por completo, complementándose entre ellos perfectamente también. De hecho, han logrado poner en pie a todo el teatro, y eso que el Cervantes es bastante grande. Gran y emotivo gesto ha tenido también Fran Perea al dedicar la función a Nacho Albert, escritor y director teatral al que conocí hace un tiempo y que, lamentablemente, ha fallecido demasiado pronto. Que los aplausos te acompañen, Nacho.