Esta misma mañana os he compartido mi opinión sobre Dando vueltas por tu interior, novela gráfica del ilustrador Inkoherente y, como os he adelantado en esa misma reseña, esta tarde lo tenemos aquí.
¡Hola! Antes de nada, darte la bienvenida a Chica Sombra, siéntete como en casa. Cuéntame, ¿cómo es un día normal en tu vida?
¡Hola! Gracias por la bienvenida.
Pues un día normal para mí es aprovechar las mañanas todo lo que pueda, siempre me hago una lista de cosas que tengo que hacer y las incorporo en una rutina de trabajo que tengo preparada para hacer por las mañanas, cosas que me ayuden a mejorar en mi ámbito, alguna sesión de dibujo, organización de trabajo, lectura, cursos… Por las tardes trabajo como profesor de danza urbana en una academia de baile en Bilbao. Al ser una persona muy organizada, necesito tener mi tiempo bajo control y me estructuro los días por horas, que invierto para trabajar en todo lo que pueda ayudarme a mejorar y moverme como artista.
Acabas de publicar Dando vueltas por tu interior, donde tus bonitas y sutiles ilustraciones nos llevan de viaje hacia nuestras decisiones y nuestros errores, nuestro miedo a cagarla. ¿La has cagado tú mucho a lo largo de tu vida?
Sin duda, al igual que yo, todo el mundo. Y a veces nos fustigamos mucho por esas cagadas y nos empeñamos, y nos enseñan, que es algo malo el no hacer bien las cosas, cuando muchas veces nadie sabe cómo actuar en ciertas situaciones de la vida, que además se ven condicionadas por un millón de cosas como puede ser el día que lleves, lo que le sucede a tu entorno o incluso cómo te has despertado ese día. Creo que por eso la gente empatiza tanto con mis viñetas, ya que se ven reflejados de cierta manera en esas situaciones que plasmo y que hasta el momento ni si quiera lo habían identificado en su vida o como un problema, porque no hay una introspección personal, no invertimos en nuestras emociones o en nuestra salud mental lo suficiente.
Tras leer tu libro tengo que decir que lo que más me ha gustado es ver la reiteración que tienen tus viñetas de decirnos que, para lograr algo, antes tenemos que equivocarnos mil veces. ¿Has perdido algún tren importante por miedo a dar el paso?
Creo que todos los trenes son importantes, aunque pensemos que no lo son, porque realmente nunca sabes a dónde te va a llevar, puede que la parada a la que ibas no te guste, o que el tren vaya en la otra dirección. Supongo que he perdido trenes que podrían haberme llevado a algún lugar importante, pero en ese momento estaba muy bien disfrutando de las vistas desde la estación, y tomar esa decisión también es importante. Supongo que las personas no tenemos miedo a dar el paso de coger el tren, sino a todo lo que viene después, creo que no nos vemos o sentimos preparados para la siguiente parada. Subirse a un tren no da miedo, es más el miedo a no saber si podré con todo lo que viene, a cambiar un poco tu vida en un instante, a no decepcionar.
Tus estudios están totalmente relacionados con el arte. ¿Tenías muy claro a lo que te querías dedicar?
No lo tenía nada claro, solo sabía que me gustaba mucho dibujar, desde pequeño. Me pasé toda la secundaria dibujando, y cuando terminé fui a estudiar un grado de telecomunicaciones, cosa que no me interesaba en absoluto ni sabía nada del tema, así que las clases me las pasaba dibujando. Estuve poco más de un mes, hasta que se me presentó la oportunidad de hacer bachillerato artístico y nunca pensé que me iba a encantar tanto, fue descubrir un mundo nuevo del que no tenía ni idea, pero que me apasionaba aprender. Y a partir de ese momento toda mi vida se volcó sobre el arte, por eso quise especializarme como ilustrador al acabar bachiller, y seguir formándome a día de hoy.
Tienes decenas de miles de seguidores en tu Instagram. ¿Cómo de necesarias crees que son las redes hoy en día para promocionarse?
A día de hoy considero que sí son importantes para llegar a que la gente vea tu trabajo, es un portfolio digital en una plataforma que todo el mundo utiliza y con una respuesta instantánea por parte de los espectadores. Lo malo, que si alguien está interesado en tu trabajo como artista, de manera directa o indirecta, va a decantarse más por alguien que tenga más número de seguidores o de likes, que de la propia obra. Se ha convertido en un reflejo de estatus social, erróneo en mi opinión. Instagram sigue siendo una red social hecha por y para vender, premiando los perfiles más activos y las promociones pagadas. No es un museo donde la gente se para a mirar, todo va a mil por hora, vivimos rodeados de constantes estímulos visuales y tenemos que luchar para resaltar entre todos ellos. Es una buena forma de utilizar tu arte como promoción, pero no es el lugar donde tienes que exponer tu obra, ni donde debes valorarla en base al feedback que recibes comparado con el que recibe otra persona. Hay que tener presencia en las redes, pero hay que tener una presencia más fuerte en persona, no quedarse solo ahí.
¿Me puedes contar algo sobre tus próximos proyectos?
Todavía no 😊
Para terminar, darte mil veces las gracias y hacerte una última pregunta: ¿eres feliz?
Ni soy feliz, ni infeliz… Digamos que estoy en proceso de serlo, pero sin buscar serlo. Es como una de mis viñetas, que dice: “No sé lo que busco, pero me gusta lo que voy encontrando”.
¡Buaaaaa, genial! Me ha encantado 😃💋
ResponderEliminarMuy buena entrevista. Me ha gustado conocer al autor.
ResponderEliminarBesotes!!!
Muy interesante entrevista. Gracias por tu compartirla.
ResponderEliminarUn saludo!