Diez años después de los terroríficos asesinatos en la Freddy Fazbear's Pizza, Charlie, la hija del antiguo propietario de la pizzería, y sus amigos de la infancia se reúnen para recordar el aniversario de la tragedia a las puertas del local que ha estado cerrado y abandonado durante todos estos años.

Cuando encuentran la manera de entrar a la antigua pizzería, descubren que las cosas no son como eran en el pasado. Las cuatro mascotas animatrónicas han crecido y sus patrones han cambiado. Ahora tienen un oscuro secreto y una mente macabra en la que el terror y la muerte son sus prioridades.

Me he llevado una tremenda decepción con este libro. No he jugado aún al videojuego, aunque tengo intención de hacerlo en estos días, pero el tráiler de la película me tienta muchísimo. Aprovechando que teníamos este libro en casa, decidí leerlo en primer lugar. Me ha resultado aburrido, lento y casi sin chicha.

Charlie, nuestra protagonista de diecisiete años, regresa a Hurricane, el pueblo de su infancia, para asistir a un homenaje que hacen los padres de un amigo suyo que desapareció. Precisamente, lo hizo en el Freddy Fazbear´s Pizza, restaurante propiedad del padre de Charlie. ¿Qué tiene de especial el local? Animales animatrónicos que el padre de la chica fabricaba. Cuando entra con sus amigos a la antigua pizzería, en la actualidad abandonada, se dan cuenta de que esos animales no son los mismos, algo en ellos ha cambiado...

A favor de la novela tengo que decir que la ambientación sí me ha parecido fascinante. ¿Una pizzería abandonada con muñecos animatrónicos? Me parece fabuloso como escenario para una historia de terror. Y sí, me ha encantado: su decoración de los 80, sus muñecos que parecen tener vida propia, su tiovivo... Yo también entraría a descubrir sus secretos linterna en mano. Sin embargo, el resto me ha parecido muy soso. No he cogido cariño a ningún personaje, ni siquiera a Charlie, y hay tramas que se quedan muy poco hiladas, dejando la sensación de estar a medias, de que no que se cuenta todo. Que sí, que hay dos partes más, y quizá es la pega más grande que tengo con este: demasiado introductorio.

En resumen: no sé si me leeré las dos siguientes partes, ya que esta me ha decepcionado y resultado lenta y, en ocasiones, aburrida.